Los jardines

Sus manos bajaron más, ya estaban situadas donde la espalda pierde su nombre. A la vez, estas, apretaba el cuerpo de la chica contra el suyo. Alzó la cabeza, ladeándola levemente, para que esta pudiera trabajar mejor en su cuello. Tomó el relevo y posó ahora sus labios en el cuello de la "diablesa", besándolo y dejando alguna marca rojiza en él. -¿El mal encarnado? -Susurró, con una sonrisa maliciosa entre sus labios.

Sonrió ampliamente tras posar sus manos en los pechos de la chica. Siguió desabrochando los botones que faltaban lentamente.-He sido malo y.. ¿Vienes a llevagme al infiegno? -Dijo imitando su tono francés, con un tono melodramático propio de un gran actor. Volvió a situar sus manos en los senos de la francesita, que ahora solo estaban protegidos por el sujetador.

Se inclinó levemente para que la chica pudiera apoyar más cómodamente la cabeza. Situó sus manos en los muslos de la chica, y las subió lentamente recorriendo su cuerpo hasta llegar a los pechos. -Ahá, Evan. ¿Y cual es tu nombge? -Quitó el sujetador ya desabrochado y posó cada mano en cada uno de sus pechos. La aferró más a su cuerpo mientras recorría con su lengua desde el lóbulo de su oreja hasta el hombro de la chica, mordisqueando levemente su cuello.

Sus manos volvieron a bajar y se colaron por debajo de su pantalón. -¿Cómo quieges que te llame entonces? -Preguntó curioso. Su boca dejaba húmedos besos por sus mejillas.

Agarró la mano de la chica que acariciaba su mejilla y la devolvió a su torso. Aprovechó que tenía sus disponibles y depositó un beso en ellos. -¿Clémentine? -Trató de adivinar mientras sus manos seguían bajo el pantalón de la chica.

Sacó las manos de su guarida para que la chica pudiera maniobrar con más facilidad. -¿Amande? -Mientras la chica besaba su torso él acariciaba su melena, suavemente.

-Arianna.. Me gusta. -Murmuró. Cuando se dió cuenta la chica había desabrochado los pantalones de ambos. Era rápida. Alejó unos centímetros su cabeza al ver su mirada, tentador.

Te vendgas conmigo de todas fogmas… *Dijo acercándose a sus labios con una voz tentadora; mordió su labio inferior* ¿Alguna petición? *Rodó los ojos como si ya estuviese cansada de repetir esa misma frase a todos los mortales*

Alzó la vista pensativo. Vaciló unos instantes y tocó con su dedo índice los labios de la chica. -Tú. -Apartó su propio dedo para asaltar los labios de Arianne. -¿Petición aceptada? -Dijo tras terminar el beso.